“¿Por qué una empresa como Tesla se mete a hacer coches? Porque cree que va a cambiar las cosas y a hacerlo mejor que otros”, dice Román Ramírez. Y, ¿por qué cuatro destacados hackers españoles crean una plataforma para la detección del talento?, “porque queremos ayudar al mundo. Porque hay mucha gente que está empezando y que no tiene oportunidades, que no sabe demostrar sus habilidades, su talento ni sus conocimientos. Que no sabe hacer que alguien se fije en ellos”, responde Omar Benbouazza.
Ramírez, Benbouazza, Juan Santesmases y Alfonso Muñoz, han creado Be Real Talent, una plataforma de gestión de talento y búsqueda de profesionales que pretende mejorar los procesos de selección de personal y hacerlos más objetivos. Su herramienta, desarrollada desde cero por ellos mismos, evalúa tanto las habilidades técnicas (hard skills) como las habilidades no técnicas (soft skills) de sus usuarios. En su equipo actual ya se implican comerciales, desarrolladores, administradores, diseñadores UX y psicólogos.
A pesar del campo en el que trabajan Ramírez y Benbouazza, cofundadores de RootedCon – el mayor congreso de ciberseguridad de España – no quieren que su herramienta sea útil únicamente para profesionales del mundo de su ámbito. Sin embargo, y por la necesidad de empezar por algún punto, qué mejor que hacerlo desde un sector en el que tienen contactos, influencia y alcance. “En un principio es algo que conocemos y vamos a atacar, pero la idea es extrapolarlo a todo tipo de profesiones, carreras y conocimientos”, explica el segundo.
¿Cuándo nace Be Real Talent?
Hace algunos años, durante un curso, Ramírez tuvo que pasar un test de personalidad. Le gustó descubrir algo que, a priori, no era muy intuitivo: la persona que hacía el test aseguraba que todo el mundo tenía talento. Lo que ocurre, dice, es que muchas veces una persona, con un talento determinado, está en una posición de la organización que no le permite expresarlo.
El experto en ciberseguridad pensó que tener en cuenta las respuestas de un test válido podría ser interesante a la hora de que una empresa encuentre al trabajador que está buscando. También para que este último entienda cuáles son sus ventajas y limitaciones. “Muchas veces pasa que tienes a una persona introvertida en un puesto de cara al público, y eso es un problema. Entre otras cosas, porque sus capacidades no están bien aprovechadas”.
Pronto comenzaron a trabajar en lo que acaba de materializarse como Be Real Talent, una web que en pocos meses estará abierta al público: primero tuvo lugar la documentación sobre las metodologías para hacer preguntas sobre personalidad. Siguieron con la lectura de libros de psicología de análisis y recursos humanos, continuaron desarrollando la plataforma e implementando los conocimientos hasta validarlos con datos estadísticos publicados en asociaciones de psicología de referencia.
Pero, ¿cómo se mide el talento? ¿Qué es el talento? ¿Tener mucha imaginación? ¿Ser muy efectivo solucionando tareas? “En nuestra opinión el talento no es un hecho objetivo, sino que es la expresión de las capacidades de una persona cuando está en el lugar correcto”. Eso solo se consigue con el autoconocimiento, siendo conscientes de quiénes somos, de cuál es nuestra naturaleza y nuestro temperamento. “Si no, no vas a ser capaz de entender por qué fallas en una determinada tarea”.
Be Real Talent trata de descubrir a cada profesional ese talento y ubicarle en el lugar correcto, “no en falsas posiciones o puestos equivocados donde lo va a pasar mal personalmente y no va a dar lo esperado al empresario o cliente”, asegura Benbouazza.
Para ello el sistema de este programa se basa, en primer lugar, en hacer preguntas polares a los usuarios dándoles la posibilidad de elegir una única respuesta. Después, esas respuestas son analizadas según un conjunto de metodologías psicológicas correlacionadas que logran en sus conclusiones una efectividad de más del 90 %. El usuario también tiene la oportunidad de, si le interesa, hacer un test concreto de una metodología concreta.
Para que al usuario no le resulte pesado responder a demasiadas preguntas, los creadores de esta plataforma han hecho que, cuando este se registre, solo tenga que solucionar una veintena de cuestiones. Posteriormente, un robot que ellos mismos están programando seguirá preguntando a cada persona hasta completar 134 preguntas. “Además, los estados de ánimo son peligrosos, por lo que preguntaremos varias veces sobre cuestiones que generen duda. Esto forma parte del motor antifraude de la plataforma”, dice Ramírez.
Una herramienta mejorada y diferente
Después de someterse al test de su propia plataforma, Ramírez ha descubierto que es una persona que tiende a la automejora. Es un comunicador excelente, es bueno a la hora de generar ideas, tiene encanto, es popular y consigue entusiasmar a la gente. Por el contrario, es una persona muy competitiva, asume tareas que realmente no puede gestionar, no puede seguir proyectos, se aburre con sus parejas, es argumentativo, discute hasta la última coma y le gusta asumir riesgos económicos.
“Todo esto tiene mucho que ver con desarrollos estadísticos, son indicadores de personalidad que se miden con el test. Luego también evaluamos los conocimientos”. Van desde los más habituales, como deportes o idiomas; hasta los más técnicos, como preguntas sobre programación en Python si eres desarrollador.
Este es uno de los puntos diferenciadores de la plataforma de estos hackers. Quieren asegurarse de que, cuando alguien dice saber de una materia determinada, sea cierto. “El valor es mayor para el usuario y posibles reclutadores que tendrán en cuenta tanto la personalidad como los conocimientos”, dice Benbouazza.
Cualquiera pensaría que una pregunta técnica podría responderse preguntando a Google. Si es así, estaría equivocado. “Esa posibilidad está rota en la plataforma, porque generamos preguntas aleatorias con valores de entrada aleatorios donde tienes que responder con el valor de salida que también es aleatorio”, detalla Ramírez. Añade que, si alguien coge la pregunta y crea una herramienta para resolverla, entonces es que sabe responderla.
Más allá de esto, cada usuario también será evaluado por su reputación pero apenas por la experiencia, de la que estos hackers no se fían. “El 90 % de lo que la gente dice de sí misma en Linkedin es falso”, dice Ramírez.
Reducir la incertidumbre y eliminar ‘morralla’
Estos emprendedores quieren conseguir que cada uno sea consciente de sí mismo y pueda mejorarse. También que los reclutadores puedan buscar datos objetivos. “Esto va a ayudar a los departamentos de recursos humanos a quitarse morralla de en medio antes de hacer una selección”, dice Benbouazza.
Así se reducirá la incertidumbre de la empresa, que sabrá que ha contratado a la persona correcta, así como la del usuario, que entenderá que está en el lugar adecuado para explotar su potencial.
De esta forma, tal vez, las ofertas puedan mejorar: las compañías querrán asumir el riesgo de contratar a quien realmente merece la pena. Además, puede ser útil para aquellas entidades que compran otras divisiones y no conocen bien al personal de cada una de ellas. “Esta herramienta les ayudará mucho a la hora de identificar roles, conocimientos y talentos ocultos”, explica.
Por el momento, y aunque Be Real Talent no es accesible a cualquiera, ya cuenta con sus primeros clientes tras iniciar un crowdfunding. En junio sus creadores tendrán lista la plataforma privada para quienes han participado en él, en septiembre contarán con la versión beta pública, y en octubre se abrirá al público de manera oficial. Para ellos España es solo el comienzo de una aventura que esperan, pronto, se convierta en internacional.