Marcos Neila, alumni del Máster en Arte y Diseño Visual de Videojuegos de U-tad, es una de esas piezas sin las que un puzle – en este caso el del área de videojuegos de U-tad – no estaría completo. Él es Game Artist y Graphic Designer, y uno de los integrantes de Tessera Studios, estudio de videojuegos que nació en nuestras aulas como proyecto final de máster, y que ha recolectado ya unos cuántos éxitos que nos hacen sentir mucho orgullo.
Recientemente el equipo que dio a luz al galardonado Intruders: Hide and Seek, ha anunciado su nuevo proyecto para Realidad Virtual: R00T: Rise of the Revolution. El juego está actualmente en desarrollo y en búsqueda de financiación. Además, ha sido seleccionado como finalista en la Convocatoria de Proyectos de WEIRD Market.
Después de más de cuatro años trabajando para un estudio propio, hemos querido hacer balance con Marcos sobre lo aprendido durante estos años, y sobre su concepción sobre el mundo del arte y de los videojuegos. ¡Dentro entrevista!
¿Dónde estabas antes de U-tad?
Antes de entrar en U-tad me había licenciado en Bellas Artes, y cursé un postgrado de Fine Arts & Computer Arts con el que hice mis primeros pinitos en arte digital. Después del postgrado estuve unos años trabajando como diseñador gráfico y director creativo en algunas agencias de Madrid, tanto de publicidad como de marketing. Esos años me aportaron mucha experiencia laboral donde aprendí a trabajar profesionalmente, algo que, aunque parezca mentira, hay que aprender. A pesar de eso, el trabajo en sí que desarrollaba en las agencias nunca me hizo demasiado feliz. Pasados unos años, y ahorrado un dinero, me atreví finalmente a cursar un máster que me formase para dedicarme a mi gran pasión de siempre: el mundo de los videojuegos. Fue así como encontré el máster de U-tad en arte digital enfocado al desarrollo de videojuegos… ¡y de cabeza que fui!
Si hablamos de arte y videojuegos, ¿qué es lo primero que te viene a la cabeza?
Pues diría que lo enormemente multidisciplinar que es. Es decir, tienen cabida los artistas 3D, concept artists, artistas gráficos, de interfaces… En general cualquier persona con cierta sensibilidad artística puede disfrutar de lo lindo desarrollando todo su talento en un proyecto de videojuegos.
¿Crees que en sí mismo el videojuego es un arte?
El primer contacto que tuve con este sector fue a través de los libros de arte que me podría permitir comprar hace ya unos años. Ojeaba sus páginas, me quedaba con los ojos abiertos como platos y decía: “vale, yo quiero hacer esto con mi vida”. Negar que existe arte detrás de un videojuego es tan absurdo como negárselo al cine o a la literatura. La polémica, y en mi opinión el error, suele venir al pensar en los videojuegos como un simple producto de consumo. Existe una enorme cantidad de procesos creativos y mano artística detrás de un desarrollo, que posiblemente abriría los ojos a más de un escéptico. Los videojuegos, al igual que otras disciplinas, puede ser un medio con el que expresar una sensibilidad artística y, aunque afortunadamente ya estamos más cerca de la aceptación más generalizada, creo que todavía faltan unos años para que el sector se gane el respeto que se merece en este sentido.
¿Cómo es la experiencia de enfrentarte desde el punto de vista artístico a la concepción de un videojuego propio desde un estudio propio?
¡Yo creo que aquí es donde se abre el famoso debate de si es mejor trabajar por cuenta propia o ajena! Enfocar un desarrollo propio tiene muchas ventajas, casi tantas como desventajas. El síntoma del lienzo en blanco es bastante típico. Sentir que no existen cotas o límites a tu creatividad en ocasiones puede resultar abrumador, y hay quien se siente más cómodo con una dirección creativa ya marcada. Personalmente disfruto mucho desde la concepción inicial de una idea hasta su ejecución final. Se pasan un montón de pequeñas pruebas y consensos con el resto de los departamentos, lo que supone todo un desafío, ¡pero eso es lo bonito!
Cuáles son las ventajas e inconvenientes de trabajar para una empresa propia?
¡Pues rápidamente me vienen a la cabeza los inconvenientes! Pero no hay duda de que tiene cosas igualmente buenas. En nuestro caso fundamos Tessera Studios justo después de salir de U-tad, así que nuestra experiencia se resumía en: por un lado, de videojuegos, escasa y, por otro, de empresa, ninguna. La gente suele pensar que tener un estudio es algo siempre súper chulo y que estás desarrollando a tu aire todos los días, cuando la realidad es que la parte empresarial y de gestión es casi tanto o más importante. Tener que lidiar con gente aprovechada o situaciones a las que no estás acostumbrado es casi el día a día. Desde luego es un privilegio tener control sobre los proyectos que quieres desarrollar como estudio, aun siendo algo bastante complicado. La búsqueda de financiación y publishing siempre está ahí, al igual que compaginar en los primeros años desarrollos en colaboración, que a lo mejor no te llenan al mismo nivel creativo, etc. En definitiva, se vive con menos preocupaciones trabajando por cuenta ajena, pero con esfuerzo y ganas, sacar adelante un estudio propio es una sensación increíble.
¿Qué te aportó estudiar en U-tad?
Pues como anécdota decir que antes de entrar en U-tad mandé mi currículum a algunas de las grandes empresas de videojuegos, y sólo ahora me doy cuenta de lo poco formado que estaba para el sector. En U-tad aprendí mucho, desarrollo teórico, técnico y conocer el funcionamiento de un estudio profesional. Lo absolutamente necesario en un profesional de videojuegos.
¿Ha sido clave para llegar a tu momento actual?
Está claro que sin la formación adquirida en U-tad no podría haber entrado en el mundo de los videojuegos, eso lo tengo claro y creo que fue una de las decisiones más arriesgadas y correctas que he tomado profesionalmente. Si tienes un sueño eres tú el/la que tienes que perseguirlo, nadie va a venir a hacerlo por ti. ¡Puede sonar muy grandilocuente, pero de verdad que pienso así! Las rutinas, tanto buenas como malas calan muy rápido y tendemos a acostumbrarnos a todo. Formarse en aquello en lo que queremos ser buenos es imprescindible, y más en un mundo profesional tan competitivo como en el que vivimos.
Dentro de los departamentos de un estudio, la parte artística es una actividad muy vocacional. Creo que te tiene que gustar, y debes tener cierta sensibilidad, desarrollada o por desarrollar, en el mundo del arte. Pueden ser cómics, animación o pintura, pero ese amor tiene que existir. Quien estudie el Máster en Arte y Diseño Visual de Videojuegos de U-tad descubrirá cosas que tal vez no le gusten tanto dentro del arte en videojuegos, pero también aquellas que le volverán loco (¡positivamente, claro!). Se trabaja mucho y se aprende mucho, y depende de cada uno y de su amor e implicación con lo que hace que todo ese conocimiento cale en uno mismo. Si te lo tomas en serio puede ser una de las mejores experiencias formativas.
¿Cuáles son tus retos futuros?
¿Retos? ¡muchos, claro! En Tessera Studios querríamos seguir creciendo como empresa a nivel nacional, así como tener cada vez más control sobre los desarrollos, que creo es el sueño de todo estudio. A nivel personal y profesional sería algo parecido, seguir desarrollando a la vez que aprendiendo y ser mejor profesional cada día. También como sueño personal, y creo que es extrapolable al resto de compañeros de Tessera, nos encantaría poder crecer como plantilla y dar trabajo a los enormes profesionales que hay y que se forman en este país y poder afianzar la industria del videojuego en España.
¿Nos puedes contar en qué punto está ahora Tessera Studios?
Pues por fortuna la empresa no para y tenemos un par de cosillas entre manos, ¡aunque me temo que algunas no te las puedo contar! Hay proyectos que por contrato y por ahora no tenemos permitido hablar, pero sí es cierto que en paralelo seguimos trabajando en nuestras propias ideas. Después del lanzamiento de Intruders: Hide and Seek para PS4/PsVR y PC, nos hemos quedado ciertamente enamorados de la Realidad Virtual, y hemos seguido trabajando con ella.
Hemos desarrollado trabajos para otras agencias, colaboraciones de todo tipo, y ¡recientemente hemos hecho público nuestro último proyecto ROOT: Rise of the Revolution! Aunque actualmente se encuentra en fase de prototipo y consiguiente búsqueda de financiación y publishing, estamos súper contentos con este proyecto. Se trata de una idea que llevábamos años trabajando y que por fin nos animamos a darle forma. Del mismo modo tenemos otros proyectos en la recámara, con enfoques distintos a la realidad virtual. Cosas ciertamente variadas que con suerte fructificarán pronto.
Como bien sabes, Intruders: Hide and Seek fue nuestro proyecto de fin de máster y un fantástico punto de partida y actual carta de presentación de Tessera Studios. Artísticamente aprendimos mucho montón durante su desarrollo, y el equipo en su conjunto aumentó su valor. Ahora somos capaces de desarrollar con mayor soltura y afrontar desafíos mayores.
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