La explosión de las start-ups de base tecnológica es uno de los fenómenos más relevantes de los últimos años. Al final de 2013, según datos de World Startup Report, en el mundo se habían lanzado alrededor de 140.000 start-ups. El nacimiento y el espectacular crecimiento de estas iniciativas, a menudo concentradas en determinados polo de atracción – como Silicon Valley en EEUU, o Berlín y Londres en Europa – es debido a muchos factores: la disponibilidad de profesionales de talento, un completo ecosistema de financiación, incubación y aceleración y el fácil acceso a la tecnología. En este último incide otro fenómeno no menos revolucionario, que es el Cloud Computing.
El paradigma de la nube introduce unas facilidades impresionantes para las start-ups, que son la mejor gasolina para arrancar sus motores:
- Igualdad de condiciones de juego: el cloud computing pone en condiciones a las start-ups de competir con las grandes empresas, ya que les proporciona recursos que en pasado eran muy costos y de difícil acceso para ellas
- Coste de arranque reducido: las características de “pago por uso” de los servicios y tecnologías basados en la nube permiten a las start-ups contener las necesidades de inversión en IT, reduciendo así las necesidades de financiación y permitiendo concentrar los recursos captados en el desarrollo de producto o servicio y en su comercialización.
- Costes de fracaso reducidos: el poder reducir la inversión inicial permite, en caso de que la idea no tenga éxito, ponerse rápidamente a trabajar en nuevas ideas sin el lastre de inversiones tecnológicas no aprovechables.
- Crecimiento escalable: las mismas características permiten, de la misma manera, adaptar la inversión en recursos de computación dependiendo de las necesidades de la empresa en tiempo real, adaptándose de estas formas a los ritmos de crecimiento de la start-up.
- Nacer globales: en el sector digital y, cada día más, también en los sectores tradicionales, el mercado es global y el cloud permite lanzar, comercializar y sustentar negocios a escala mundial desde el primer momento.
En definitiva, el Cloud Computing es un paradigma que ha cambiado las reglas del juego no para las iniciativas emprendedoras y para la totalidad del sector digital, por lo cual ya no es pensable lanzar u operar un negocio sin conocer y poder aprovecharse de las ventajas de la nube. Para ello, U-tad, el Centro Universitario de Tecnología y Arte Digital, ha diseñado el programa “Experto en Cloud Computing”. Este ambicioso programa de 300 horas, tiene como objetivo preparar a profesionales para que sean capaces de crear y administrar servicios en la nube en cualquier tipo de empresa u organización, desde start-ups hasta grandes multinacionales.