La UE asegura que el próximo año, 2017, habrá más de 850.000 empleos que se quedarán sin cubrir por falta de profesionales. Muchos de ellos son puestos para desarrolladores y especialistas de software.
En los últimos años Europa se ha visto sacudida por una serie de turbulencias financieras. Estos vaivenes económicos han tenido especial incidencia sobre algunos mercados, como el español, donde los niveles de paro se dispararon hasta niveles nunca conocidos. Algunos colectivos, como muchos recién licenciados, veían sus posibilidades de incorporarse al mercado laboral reducidas notablemente.
Este escenario, tan asentado en el imaginario colectivo, choca frontalmente con una de las últimas cifras que la UE ha hecho pública: 850.000 puestos de trabajo se quedarán sin cubrir en 2017. Y es que las estimaciones de Bruselas arrojan una clara conclusión. Las empresas son incapaces de encontrar profesionales con las habilidades técnicas que cubran las necesidades surgidas de una desbocada evolución tecnológica que no tiene visos de aflojar el ritmo.
Muchos de esos empleos que quedarán ‘huérfanos’ son puestos de programadores y desarrolladores. La transformación digital que ya ha impactado directamente en la línea de flotación de todo tipo de compañía hace cada vez más necesarios ingenieros informáticos no tan cercanos al ‘hardware’ y más centrados en el software.
En algunos casos, la urgencia parece apremiante como en Finlandia. En el país nórdico han puesto en marcha un programa para formar a refugiados en esta materia y así poder cubrir las carencias de estos profesionales. Fruto de esos cambios sufridos en las empresas, se han creado nuevos mercados como el del ‘cloud computing’, un nuevo ‘El Dorado’ para los especialistas en desarrollo. “La nube puede dar a Amazon más dinero que el ‘retail’”, auguraba el director de Tecnologías del gigante del comercio electrónico, Werner Vogels, en una visita reciente a España sobre AWS (Amazon Web Services).
Precisamente Amazon anunció en marzo la elección de Madrid para instalar un nuevo ‘hub’ tecnológico, donde se centralizarán esfuerzos a nivel mundial para desarrollar nuevas soluciones para sus negocios. Esta llegada supondrá la creación de decenas de nuevos empleos dirigidos a especialistas en software, como los que se forman en el Grado de Desarrollo de Contenidos Digitales. Especialistas en Java, LAMP, PHP, protocolos web, managers de desarrollo… Un fiel reflejo de las empleos que se demandan en el sector y que cada día emite nuevas ofertas.
Profesión con gran salida
No en vano, según un estudio de Tecnoempleo, la actividad que más ofertas genera en la actualidad es el desarrollo web y, sobre todo, móvil. Una idea reforzada por un informe de Adecco donde Ingeniería Informática aparece, junto a Administración y Dirección de Empresas, en lo más alto de la clasificación de carreras con más salidas.
Todos estos datos, que avalan la existencia de una alta empleabilidad y una demanda real de profesionales, contrastan con los problemas para encontrar estos profesionales. Todo ello, a pesar de contar con una buena remuneración, que se sitúa por encima de la barrera de los 30.000 euros anuales el primer año. La pregunta, por tanto, es inevitable: ¿Dónde están todos estos programadores y desarrolladores que casi nadie encuentra?
