Miriam Martínez es doctora en Comunicación Audiovisual y profesora de Producción Digital en el Grado de Animación de U-tad. Gracias al programa Erasmus+, ha podido pasar una semana impartiendo diferentes lecciones en Haute École Albert Jacquard (Namur, Bélgica), una experiencia que piensa que todos los profesores deben vivir “al menos una vez”. Desde U-tad hemos hablado con ella para que nos cuente un poquito más. ¿Te quedas?
¿En qué ha consistido tu semana en Namur?
He estado en Namur de domingo a viernes. El miércoles impartí dos clases de producción en los Grados de Periodismo y Relaciones Públicas, y el jueves y el viernes di dos workshops sobre transmedia. Estoy muy contenta de haber vivido esta experiencia, para mí fue un reto porque tenía que dar clases en inglés, pero me salió fenomenal, todo el mundo me entendió sin problemas.
¿Has conocido a otros docentes y profesionales?
Sí. Todos en la universidad se han portado fenomenal conmigo, me han acogido estupendamente. El lunes tuve una reunión con el departamento de Internacional y luego me invitaron a comer; el martes tuve el día libre para visitar la ciudad; y el miércoles, el jueves y el viernes comí con distintos profesores en sitios característicos de la ciudad, también hemos dado paseos… Han sido encantadores. Se han preocupado porque estuviera bien y todos me han dado sus contactos.
¿Qué te ha parecido Namur?
Namur es una ciudad pequeñita, aunque muy bien comunicada con la capital, con Bruselas. Tiene un paseo por el río magnífico. La ciudad es preciosa y está llena de estudiantes y familias.
¿Qué te ha aportado profesionalmente esta experiencia Erasmus?
Nunca había dado clases en un entorno internacional. Ha sido un reto profesional potente, pero creo que me he enfrentado a ello y ha sido muy gratificante porque me he traído contactos con profesores de allí. Hemos estado hablando incluso de seguir colaborando en el futuro, escribir algún artículo juntos, o que puedan contar conmigo para impartir otras lecciones. Además, todos tienen mi contacto y me han agregado a LinkedIn.
Cuando acabé las lecciones algunas alumnas de Periodismo me hicieron entrevistas para hacer un reportaje sobre mí y mis clases. Me hicieron fotos y todo, como si fuera una estrella del rock. Fue muy gracioso.
¿Cómo valoras la labor de la Oficina de Relaciones Internacionales de U-tad?
El proceso me ha parecido muy sencillo, esperaba que fuera mucho más complejo. En primer lugar, envié la documentación y una carta de invitación a la universidad, porque yo ya me había puesto en contacto con ellos y me habían respondido diciendo que les encantaría contar con mi visita. A partir de ahí, U-tad me seleccionó como una de las cuatro participantes del programa. Luego, tuvimos una llamada en la que me explicaron cómo íbamos a proceder y cuál era el importe de la ayuda. Seguidamente cogí los vuelos y el hotel y listo. Cuando llegué allí solo tuve que entregar la documentación en la universidad. Además, la ayuda económica me dio para cubrir todo: vuelo, estancia, taxis, comida…
¿Recomiendas a otros docentes esta experiencia?
De hecho, ya se la he recomendado a unos compis para el año que viene. Incluso les he dicho que si quieren ir al mismo destino que yo les ayudo a ponerse en contacto con la universidad. Que lo prueben, que es una semana, y es una experiencia muy buena no solo a nivel profesional, sino también personal: irte a una ciudad que no conoces, estar allí una semana, ir a pasear, a comer… Es un tiempo dedicado a nosotros que con la vorágine del día a día no tienes. Todos los profes deberíamos vivir al menos una vez una experiencia así.
Este proyecto está cofinanciado por el programa Erasmus+ de la Unión Europea. El contenido de esta publicación es responsabilidad exclusiva de U-tad y ni la Comisión Europea, ni el Servicio Español para la Internacionalización de la Educación (SEPIE) son responsables del uso que pueda hacerse de la información aquí difundida.