Hace unas semanas se estrenó Klaus, la película española de animación desarrollada por Sergio Pablos (creador de ‘Gru, mi villano favorito’) y el estudio The SPA Studios para Netflix. Quienes ya la han visto coinciden en la belleza de esta producción. Desde U-tad estamos muy felices de que alumn@s y antigu@s alumn@s hayan participado en la producción. Por eso en los próximos días publicaremos las impresiones de algun@s de nuestr@s chic@s en nuestra sección de noticias.
Comenzamos hace unos días con una entrevista a Sergio Morales, antiguo alumno de nuestro Grado Oficial en Animación; y seguimos con una entrevista a Gádor Valls, antigua alumna del Máster en Game Design de U-tad, que ha trabajado como coordinadora de producción en Klaus. Así ha sido su experiencia:
¿Cuál ha sido el trabajo de tu departamento en Klaus?
Cuando acabó la producción mi cargo era el de coordinadora de producción, principalmente del departamento de efectos 2D, aunque también echaba una mano en el departamento de Clean Up junto a mi compañera Carmen Gallardo. Sin embargo, entré a trabajar en la película como asistente de producción, y una de las mejores cosas de trabajar en una producción tan grande es que siempre acabas colaborando en otros departamentos, lo que te permite tocar un poquito de todo.
¿Qué supone para ti haber participado en esta producción?
Haber participado en esta producción ha sido una experiencia brutal en muchos sentidos. El crecimiento personal y profesional que me ha aportado es incomparable. Solo puedo decir que, aunque siempre había querido dedicarme al sector en el que estoy ahora, Klaus ha conseguido que tenga el corazón dividido.
Klaus es una apuesta muy potente del cine español, que además se retransmite mediante una plataforma tan potente también como Netflix, ¿qué opinas sobre esto?
Durante la producción no paraba de repetirlo: «¿la gente que está aquí será consciente de lo gordo que es esto? ¡Esto puede cambiar la industria de la animación en España!». Que Klaus haya sido un proyecto exitoso bajo el amparo de Netflix pone el foco sobre nuestro país para futuras inversiones en el sector, y eso es muuuuuy bueno para todos nosotros.
¿Qué es lo que más te haya gustado e impactado de esta producción?
Yo vengo del mundo del 3D y jamás me había planteado estar en una producción 2D, y mucho menos de animación «tradicional» como ha sido Klaus. Creo que eso ha sido lo que más he disfrutado, descubrir un mundo que era totalmente nuevo para mí y que es una absoluta pasada.
¿Crees que es una oportunidad de cara al futuro haber trabajado en este proyecto?
Supongo que sí, o al menos eso es lo que me dice todo el mundo. Sinceramente no lo he pensado demasiado… Me quedo con que, independientemente de las puertas que esto me abra, lo que he aprendido no me lo quita nadie.
¿Cómo definirías tu paso por Klaus?
Trabajar en Klaus ha sido, como comentaba más arriba, una experiencia brutal. La profesionalidad y rigurosidad del equipo me ha dejado en muchas ocasiones, sin palabras. Es cierto que a veces ha sido duro, porque una película como esta requiere un nivel de compromiso y exigencia muy alto, pero como le comentaba a un amigo hace unos días, para mí el punto de inflexión llegó el día que vi el primer plano acabado. Aquel día vi el plano y os juro que estando allí, habiendo formado parte del proceso, no podía creerme lo que veía. Acabamos todos sobre la pantalla, viendo el plano una y otra vez, y babeando con lo que habíamos hecho juntos.
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- Lee la entrevista a Sergio Morales, antiguo alumno del Grado Oficial en Animación de U-tad que ha trabajado como Shot Prep Artist en Klaus.
