Centro Universitario de Tecnología y Arte Digital

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El corto Wayback, entre los favoritos de los Premios Quirino

Wayback es uno de los cortos españoles favoritos en los Premios Quirino de la Animación Iberoamericana. Está nominado a tres categorías: mejor desarrollo visual, mejor diseño de animación y mejor música original. El cortometraje, dirigido por Carlos Salgado y producido por User T38, ha contado también con el trabajo de Alfonso Casado, antiguo alumno del Grado de Animación de U-tad (coautor de ‘Pepino, el acordeonista’).

En total 24 producciones competirán en nueve categorías de estos galardones, que tienen el objetivo de promocionar y poner en valor la animación iberoamericana. España lidera la lista de finalistas a estos Premios, con un total de 11 títulos presentados. Los ganadores se darán a conocer a finales del mes de mayo en La Laguna, Tenerife, a través de la Tenerife Film Commission.

Wayback es el primer cortometraje como productor ejecutivo de nuestro antiguo alumno Alfonso Casado. En el mismo sus tareas principales han sido gestionar las negociaciones públicas y privadas, como la preventa de derechos a Movistar+ o la subvención de la Comunidad de Madrid a Cortometrajes sobre Proyecto. Entre sus tareas también ha estado vigilar el cash-flow y logísticas de la producción. “Ahora mismo actúo como el contacto administrativo del corto y trabajo mano a mano con nuestra distribuidora Madrid en Corto y con nuestro agente de ventas internacionales, Autour de Minuit”. Trata de garantizar así la mayor expansión del proyecto en el mercado internacional.

“Carlos Salgado, director del proyecto, confió en mí desde el primer momento en que comenzamos a hablar a finales de agosto de 2019, planeando la presentación en 3D Wire (ahora Weird Market). En un principio fue como una mera ayuda desde mi puesto como productor de VFX en USER T38, hasta que Guadalupe Arensburg contactó con nosotros para adquirir los derechos de emisión para Movistar+”. Este hito marcó un giro de 180 grados en el planteamiento, pasando a tener una dedicación directa como productor responsable del mismo.

A partir de ahí, asegura que 2020 fue un año complicado. Tuvo que capear el temporal por la pandemia, y su planteamiento de comenzar a finales de marzo se retrasó hasta finales de junio por las restricciones. Sin embargo, el proyecto salió adelante gracias a la dedicación y trabajo del equipo de artistas. Estaba compuesto en su mayoría por seniors. También por el apoyo de algunos juniors, entre ellos antiguos compañeros de U-tad como Alejandro Artunduaga (ANIM 2020) en modelado, Carol López-B. (MRCF 2018) en rigging, o Darío Domínguez (ANIM 2020) en animación, iluminación y render.

“Cuando comencé la carrera me parecía impensable que todo esto fuera a suceder, y mucho menos tan rápido. Me siento un privilegiado, pero también ha sido el fruto de mucho esfuerzo y sacrificio durante los últimos años”, explica. Añade que la industria del cine es un mundo muy complejo. Abrirse un hueco es una lucha a pulso en la que siempre existe un factor de suerte que puede inclinar la balanza en cualquier dirección.

Opina que iniciativas como Cartoon Springboard, por ejemplo, juegan un papel crucial. Ceden el escenario de los tradicionales MIPs y Cartoons a estudiantes y recién egresados para mostrar nuevas ideas que rompen las barreras de los mercados tradicionales. También permiten aprender en un entorno donde profesionales establecidos aportan un feedback. “Incluso pueden ofrecerse a entrar a formar parte del proyecto, como fue nuestro caso con Sparkle Animation de Portugal”.

“Cuatro meses después hemos pasado de ser tres compañeros presentando ‘Pepino, el acordeonista’ en Cartoon Springboard, a mostrar nuestro proyecto para más de 250 profesionales en Cartoon Movie como una coproducción hispanolusa”.

Premios Quirino: por un trabajo bien hecho

 

Asegura que una gran parte de por qué está donde está actualmente se la debe a Manuel Cristóbal. “Él fue quien me ayudó a encontrar mi lugar en esta industria. Cuando finalmente decidimos dar el paso de mostrar a ‘Pepino’ al mundo, después de ver nacer el proyecto en su clase, ha estado siempre presente para lo bueno y lo malo. Su inestimable orientación y consejos nos han ayudado a navegar en este mar de incógnitas. Y todavía nos queda a todos mucho por aprender. Está siendo un viaje increíble, casi onírico. Tenemos que mantenernos firmes y realistas, porque no se sabe qué nos depara el mañana”, declara.

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